martes, 28 de septiembre de 2010

Entregado concurso de anteproyecto Museo Arqueológico, Parque Arqueológico Puig de Sa Morisca. Calvia. Fundación Calviá

equipo de trabajo:    Barbara Henk, Eugenijus Bycenkovas, Ferran Ventura

El proyecto parte de dos ideas iniciales: por un lado el respeto por lo existente (árboles, paisaje, medio ambiente, fauna y flora) y por otro la construcción de un espacio microclimático, que contribuya a la reducción de emisiones de CO2, y a conseguir un museo con unas características ambientales particulares.

El espacio microclimático se conforma como la atmósfera principal del proyecto, conseguir cobijar el bosque, para crear unas condiciones climáticas particulares. Esta decisión permite trabajar con un edificio interior más libre que se abre al paisaje y se relaciona con el bosque y con los caminos de acceso al parque arqueológico de un modo más natural. Un espacio por el que pueda discurrir el territorio existente, la topografía, los árboles, la fauna y la flora del lugar.

Umbráculo.
(Del lat. umbraculum).


1. m. Sitio cubierto de ramaje o de otra cosa que da paso al aire, para resguardar las plantas de la fuerza del sol.


Definición DRAE

Para crear este espacio, se decide cobijar el bosque con una tipología de umbráculo, que nos ofrece estas condiciones climáticas particulares buscadas. Esta piel exterior nos dota de dos ventajas: conseguir este espacio microclimático interior y poder construir un edificio más liviano, con una reducción de emisiones de CO2. Por tanto la principal apuesta del proyecto es la sostenibilidad. Entendiendo la sostenibilidad como un elemento real de proyecto, no como meros aditivos y elementos que se añaden al edificio para convertirlo en más eficiente energéticamente, sino un edificio eminentemente territorial, un edificio que se integra y convive con su entorno, aportando y negociando con él. Por tanto un edificio vivo, que respira, evoluciona, late, palpita, crece, expande, contrae, envejece.